Fluit, la silla fabricada con cajas de frutas y verduras, logra un If Design Award.
Fluit, perfecta para espacios híbridos, es el resultado de la primera colaboración entre Actiu y el estudio italiano Archirivolto Design. La silla, 100% sostenible y fabricada en polipropileno y fibra de vídeo completamente reciclados, ha sido galardonada en los IF Design Awards en la categoría de Producto para espacios Retail & Public.
Fluit es una silla sostenible creada íntegramente a partir de materiales reciclados, en concreto polipropileno y 30% fibra de vidrio y entronca con la filosofía de sostenibilidad y economía circular de Actiu. Todos sus materiales están certificados por el GreenWorld Compounding y, en el caso del plástico se trata de materiales post consumo procedentes del sector agroalimentario.
Inyección de gas
Desde el punto de vista del diseño, Fluit se inspira en un velero holandés del siglo XVI de nombre Fluyt, robusto y más grande que los barcos mercantiles. Los diseñadores de Archirivolto Design han concebido una pieza transversal y lineal, de arquitectura fluida que, gracias a la tecnología, aporta ligereza, estética y estabilidad. Un objeto sinuoso y estático, sin ninguna superficie plana, que parece que inicia un movimiento.
La fabricación se realiza a través de la inyección de gas, un proceso industrial innovador que refuerza la resistencia y aporta un acabado delicado y suave al tacto. El mix de polipropileno enriquecido con fibra de vidrio fortalece la resistencia de la silla, apilable hasta seis unidades y especialmente indicada para entornos contract, como oficinas, escuelas, salas de conferencias, etc.
Investigación en sostenibilidad
“El principio fundamental del diseño de esta silla es la sostenibilidad, muy en línea con la filosofía del Parque Tecnológico de Actiu y la filosofía de trabajo de una empresa que cuida los materiales y tiene muy en cuenta la innovación tecnológica”, cuenta Matilde Sessolo, diseñadora de Archirivolto.
Giacomo Fimia, diseñador senior del estudio italiano, sostiene: “El diseño y fabricación de Fluit implicó una investigación muy interesante en torno a los materiales, partiendo en un principio de residuos del mar, que finalmente desembocó en cajas de fruta descartadas de un área cercana a la sede de Actiu, en línea con su filosofía productiva de Km 0 a partir de materias recuperadas”.