«The Hut Project», arte y diseño de la concienciación climática.

The HuT Project apuesta por explorar el cambio climático a través del arte y el diseño.

Cova Ríos / Ricardo Moreno

Cartel de la presentación de la experiencia «Welcome to 2050. Resilience Unveiled» en la Royal University of Bhutan (RUB) en el College of Science and Technology.

El proyecto The HuT Project investiga soluciones para riesgos climáticos extremos en Europa. Proyectos como «Bienvenido a 2050» y “Adaptarse o Sucumbir” combinan arte, diseño, ciencia y concienciación ambiental para inspirar cambios positivos en la sociedad hacia un futuro más sostenible.

El Proyecto The HuT, acrónimo de The Human-Tech Nexus – Building a Safe Haven to cope with Climate Extremes, es una iniciativa europea (Programa ERASMUS+) que busca investigar y desarrollar soluciones innovadoras para la prevención de riesgos climáticos extremos, especialmente centrados en el ámbito hidrológico y medioambiental. El proyecto está enfocado en investigar y comprender mejor los fenómenos climáticos que afectan a la región europea, con el objetivo de crear herramientas y estrategias que contribuyan a mitigar los impactos negativos del cambio climático.

The HuT Project cuenta con la participación de siete países de la Unión Europea en 20 regiones de similares características a las de la Comunidad Valenciana. En este consorcio se encuentran diversos socios y colaboradores, incluyendo instituciones académicas, centros de investigación, organismos gubernamentales y empresas privadas. Todos ellos trabajan de manera conjunta para estudiar la interacción entre el clima, el medio ambiente y las actividades humanas, con un enfoque particular en eventos extremos como olas de calor, sequías, inundaciones y deslizamientos de tierra. 

El objetivo del proyecto es la búsqueda de soluciones innovadoras para la prevención de riesgos climáticos extremos. Entre las actividades desarrolladas dentro del proyecto se encuentran la recopilación y análisis de datos climáticos, la modelización de escenarios futuros, la evaluación de riesgos y la formulación de estrategias de adaptación y mitigación. Por otra parte, se promueve la colaboración interdisciplinaria y la transferencia de conocimiento entre los diferentes participantes, con el fin de generar soluciones efectivas y sostenibles.

Participación de la UPV

The HuT contribuye con su labor a la generación de evidencia científica, herramientas prácticas y políticas adaptativas que pueden ser aplicadas tanto a nivel local como regional para mejorar la gestión del agua, la prevención de desastres y la protección del medio ambiente en general. Desde el grupo de investigadores de la Universitat Politècnica de València que participan en The HuTse está estudiando el cambio climático en Valencia. En la búsqueda de sensibilizar al público sobre la crisis climática, especialmente en relación con las olas de calor y la sequía en Europa, el diseño de experiencias se erige como un medio fundamental para conectar de manera activa y significativa con la audiencia. Esta iniciativa no solo busca informar, sino también generar un impacto emocional e intelectual que motive acciones concretas frente a estos fenómenos climáticos.

Cartel de la exposición «Ecologías Mínimas», de las artistas del Grupo de Investigación Arte y Entorno de la UPV.

Desarrollado por Chele Esteve

De este modo, emerge el proyecto «Bienvenido a 2050», un claro ejemplo de cómo el arte y el diseño pueden ser un vehículo poderoso para transmitir mensajes ambientales al generar una experiencia, un diseño de experiencias que tuviera relación con esos dos temas; sequía y olas de calor. Ha sido desarrollado por la profesora e investigadora Chele Esteve, junto con los alumnos del Máster Universitario en Ingeniería del Diseño de la asignatura New Promotional Platforms de la ETSI Aeroespacial y de Diseño Industrial de Universidad Politécnica de Valencia (UPV) en colaboración con el artista y periodista Salva Mascarell. La parte de diseminación y concienciación del proyecto The Hut se ha convertido en una experiencia inmersiva, que aborda la problemática del cambio climático desde una perspectiva única.

Según Chele Esteve, este diseño de experiencias busca involucrar a las personas de manera activa, brindando información, generando empatía y motivando acciones concretas frente a las olas de calor y la crisis climática en general. La clave está en crear experiencias significativas que inspiren un cambio positivo en la sociedad. Este es un proyecto que trata el cambio climático y la concienciación. Desde el primer momento tuve claro que el proceso de co-creación era muy importante y establecer vínculos con un artista local que trabajara sobre estos temas también. Así que contacte con Salva Mascarell”.

En su primera fase, el proyecto incluía una instalación de un invernadero intervenido, titulada «Welcome to 2050» (Bienvenido a 2050), que buscaba recrear el clima pronosticado para Valencia en el año 2050. Este espacio ubicado en el Jardí Botánic de la Universitat de València, se inauguró el 25 de octubre y permitía a los visitantes experimentar de manera tangible las condiciones climáticas extremas previstas para el futuro, incluyendo olas de calor y sequías. Añade la investigadora y comisaria de ambas exposiciones, Esteve SendraDesde el inicio pensamos que este mensaje debía reforzarse en un espacio emblemático, como puede ser el Jardín Botánico que aceptó encantado recibir este proyecto”.

Mascarell describe la experiencia inmersiva al ingresar al invernadero, destacando que: «Para ello pensamos en un invernadero que nosotros íbamos a intervenir con titulares relativos al cambio climático en Valencia y que recrearía el clima de la ciudad en 2050. Por eso se titulaba Bienvenidos a 2050. Acumulaba el calor de la radiación solar. En su interior tenía hojas secas que aludían a la aridez por el aroma y por el crujido cuando entrabas adentro y también contaba con una pieza artística, una pintura propia, que representaba agua y que iba desapareciendo a consecuencia de la radiación solar, puesto que está realizada sobre un tejido muy sensible a la luz«.

Lamentablemente, la fuerza de la naturaleza del mismo modo se hizo presente durante la exhibición inicial, cuando en noviembre la tormenta Ciarán devastó la estructura, evidenciando de manera impactante la vulnerabilidad frente a eventos climáticos extremos. Sin embargo, este contratiempo no detuvo el mensaje del proyecto, sino que lo reforzó, impulsando una segunda fase que abordó la economía circular y la resiliencia frente a la destrucción.

Instalación en Beniarjó

La instalación se reinventó con la instalación «Adaptarse o Sucumbir», que se inauguró el 2 de febrero en la Sala de Exposiciones Vicent Vidal Miñana del Ajuntament de Beniarjó (Valencia). En esta ocasión se integraron los elementos previamente dañados por la tormenta, añadiendo naranjas como atributo del impacto de la sequía en los cultivos. Este simbolismo se basa en la realidad de que muchas naranjas han disminuido de tamaño o calibre debido a la escasez de agua, lo que ha llevado a que los comercios no las acepten. Asimismo, se logró crear una experiencia inmersiva al impregnar toda la sala con el aroma a naranja, aspecto que desde el inicio se buscó para enriquecer la experiencia sensorial del visitante. Al mismo tiempo de ofrecer una experiencia multisensorial, con aromas que evocan la aridez y la adaptación, la instalación se complementó con la exposición «Ecologías Mínimas», que profundizaba en la relación entre arte y medio ambiente con obras de las artistas del Grupo de Investigación Arte y Entorno de la UPV.

Se puede observar cómo este proyecto no solo es un ejemplo de creatividad artística y diseño (UX), sino que fomenta la colaboración interdisciplinaria y compromiso con la concienciación climática. Al abordar temas como las olas de calor, la sequía y la resiliencia, tanto, «Bienvenido a 2050», como, “Adaptarse o sucumbir”, invitan al público a reflexionar sobre su papel en la mitigación de los efectos del cambio climático y la protección de la biodiversidad.

Viaje a Bután

Durante la primera semana de abril de 2024, la profesora e investigadora Chele Esteve viajó por un intercambio docente a la Royal University of Bhutan (RUB) en el College of Science and TechnologyRecordemos que Bután es un país ubicado en el Himalaya oriental que ha experimentado efectos significativos del cambio climático en las últimas décadas, lo que también ha impactado a sus especies emblemáticas como la secuoya gigante (Sequoiadendron giganteum). El cambio climático ha generado cambios en los patrones climáticos de Bután, incluyendo variaciones en las precipitaciones, temperaturas y eventos climáticos extremos. Estos cambios han afectado a los ecosistemas naturales del país, incluyendo bosques. En este contexto se ha realizado una conferencia sobre el desarrollo de este diseño de experiencias donde se debatió cómo desde el diseño, el arte y sin olvidar la economía circular puede fomentar la concienciación ambiental y promover prácticas sostenibles para abordar los desafíos del cambio climático. 

En esta ocasión la exposición se tituló; Welcome to 2050. Resilience Unveiled(Bienvenido a 2050. Revelando la Resiliencia). Se quiso dar visibilidad a la narrativa de la muestra con una línea del tiempo que medía 5 metros, donse se iniciaba con el desarrollo del proyecto en sus distintas, un diseño general que dio forma a estas dos iniciativas trabajando desde la investigación y comprensión del problema a la definición de objetivos, la creación de la experiencia, la implementación y difusión, llegando a la evaluación y seguimiento. 

Para el artista valenciano, Salva MascarellDesde esta experiencia se evidencia la urgencia de implementar medidas de adaptación y conservación, resaltando la importancia de acciones a nivel local y global. Para mí el diseño de experiencias que integra el arte, la ciencia y la concienciación ambiental es una herramienta valiosa para promover la comprensión y la acción frente a la crisis climática”.

El diseño de experiencias (UX) busca involucrar a las personas de manera activa y significativa, generando un impacto tanto emocional como intelectual. Proyectos innovadores como «Bienvenido a 2050» y “Adaptarse o Sucumbir”, son ejemplos claros de cómo el arte, el diseño, la ciencia y la concienciación ambiental se fusionan para inspirar cambios positivos. Nos recuerdan que cada acción cuenta en la construcción de un futuro más sostenible y resiliente para todos, motivándonos a seguir trabajando juntos en la protección de nuestro planeta.

Más info:
https://thehut-nexus.eu/