Articulada en torno a un patio central, una casa escalonada y abierta a la vida de calle.
El Barrio de San Gabriel está sufriendo transformaciones urbanas. Los nuevos bloques de viviendas de edificación abierta construidos en las zonas periféricas del barrio, junto con las nuevas grandes superficies comerciales, están produciendo que los pequeños comercios existentes en la calle Rafael Escolano, eje comercial tradicional del barrio, desaparezcan.
En dicha calle se ha construido esta vivienda, proyectada por el estudio Isaac Peral Arquitectos, que apuesta por potenciar la vida de barrio, al contrario que los nuevos bloques plurifamiliares. La planta baja de la vivienda se convierte en una prolongación de la calle. Para esto el cerramiento exterior se pliega en acordeón dejando todo el frente abierto. De esta forma, la planta baja se funde con el espacio público convirtiéndose en un espacio intermedio que permite relacionarse con los vecinos; sentarse a “la Fresca”, mantener abierta la puerta en las procesiones y desfiles de las fiestas de barrio, etc.
Se accede a un espacio ajardinado que conecta directamente con la zona de día. Alrededor de este patio se organiza toda la casa mediante un recorrido en espiral ascendente. Se inicia el recorrido mediante una rampa suave que remonta medio nivel hasta la zona de día, luego se enlaza con la escalera que salva el siguiente nivel hasta la zona de dormitorios, y finalmente, escalando por la fachada, se llega a la cubierta con vistas al mar.
Durante el recorrido, las vistas se van alternando, hacia el interior o exterior, alternativamente. Los espacios son fluidos, de forma que se puede elegir los recorridos y se han minimizado el uso de puertas y tabiques.
La introducción del patio central, el lucernario al fondo del solar y el patio ingles, conforman una sección compleja para conseguir que todos los espacios tengan ventilación cruzada e iluminación natural. Incluso el patio central se conecta con la fachada por el hueco de la escalera de forma que se introduce sol y aire por diferentes orientaciones. Esto produce una iluminación cambiante a lo largo del día y las estaciones que hacen percibir la temporalidad de forma muy acusada.
El lucernario funciona de captador solar en invierno y de chimenea de ventilación en invierno. Todo esto produce un buen acondicionamiento higrotérmico sin uso de energía eléctrica ni combustibles fósiles.
Los materiales utilizados son de bajo costo y procedencia natural; revoco a la cal, piedra Macael, madera de roble y lacada, y acero pintado. Todos estos materiales, utilizan poca energía de transformación y consiguen un bajo precio de ejecución material 800 €/m2. Mediante estas medidas, conseguimos una casa con baja huella ecológica, de bajo costo económico y que fomenta la relación social. Estos son los tres pilares fundamentales de una casa sostenible.
Obra: Casa San Gabriel
Arquitecto: Isaac Peral Codina
Arquitectos colaboradores: Luis Carreira Antón y
David Bisquert Cabrera
Promotor: Moisés Tarín García
Aparejador: Oscar Carrión Rosillo
Ingeniero: J. Miguel Carmona Paino
Fotografía: Jesús Granada
Mobiliario: Estudio & Showroom Vicente Navarro