Un local comercial integrado en el entorno para el que se han empleado materiales tradicionales.
Crear un ambiente confortable, hogareño, natural, para todo tipo de públicos e integrado en el entorno fueron las premisas para el diseño de la marca y el diseño de interior de una peluquería situada en la localidad castellonense de Morella por el estudio Vitale. De este modo, Vitale convierte una antigua casa solariega, ubicada en el centro histórico de Morella (Castellón), en una peluquería de espíritu bucólico y familiar.
La peluquería se proyecta con una estética acorde a la esencia de las construcciones locales utilizando materiales tradicionales. Se adecua un local de 40 m2 para dotarlo de una cómoda zona de espera y aprovechar al máximo el espacio para 3 puestos de corte y una zona para maquillaje cuyo protagonista es un antiguo sillón de barbero Triumph que ha sido restaurado.
El proyecto pone especial hincapié en solucionar una de las principales carencias del local: la escasa luz natural. Para dar una solución adecuada se combina la iluminación ambiental de las lámparas de camerino para los espejos con la iluminación puntual directa.
El mobiliario realizado a medida en madera pino tiene como elemento principal la estructura en espiga que actúa a modo de celosía para separar el mostrador de la zona de espera, que se resuelve mediante un banco corrido con espacio de almacenaje en la parte inferior.
Las zonas de corte y lavado se han planteado sin divisiones para posibilitar el que queden conectadas visualmente. Los puestos de corte quedan enmarcados por unos bastidores de madera que alojan varios cajones. La pared se reviste de azulejo biselado blanco brillo que acentúa una imagen familiar y tradicional. El resultado es un negocio de estética campestre, luminoso, austero y sincero.