«Una historia mediterránea»: el videojuego que recorre los paisajes de la Comunitat Valenciana

El valenciano David Fernández es director de arte de Ustwo Games, empresa creadora del juego.

Alba es una niña que aprovecha sus vacaciones de verano en la localidad ficticia de Pinar del Mar para poner en marcha una iniciativa con la que salvar la fauna de la isla y evitar la construcción de un hotel. Este es el sencillo argumento de «Alba, una historia mediterránea«, videojuego que fue lanzado a consolas y plataformas a finales del pasado año de la mano del estudio Ustwo Games, cuyo director de Arte es el valenciano David Fernández (Náquera). Fernández se basó en sus recuerdos de verano para recrear paisajes como el castillo de Serra, la Marjal del Moro, la Albufera o el casco histórico de Burjassot.

Para la creación de los escenarios, Fernández ha contado con el trabajo de la programadora Kirsty Keatchs, Ian Zell o Jessie Van Aelst, con una paleta de colores inspirada en los cuadros de Joaquín Sorolla. Como la propia Jessie ha explicado desde su cuenta de twitter, los animadores eran extranjeros (Van Aest, por ejemplo, es belga) por lo que debieron emplear cientos de referencias basadas en el uso de herramientas como Google Maps. Fernández intervino en el proceso mediante el dibujo de elementos como la barraca valenciana.

El mensaje de respeto al medio ambiente incluido en el argumento del videojuego se traslada a la realidad, ya que por cada descarga, la compañía plantará un árbol en localizaciones como Madagascar, Mozambique o Nicaragua.