Los alumnos Antonio Verdú y Mario Valle (UPV) viralizan una propuesta para el estadio de Mestalla auspiciada desde la UPV.
La pasada semana tuvo lugar en las «ruinas» del nuevo estadio de Mestalla en las Cortes Valencianas, la presentación del re-re-rediseño del estadio que reemplazará sin fecha determinada al actual Mestalla a cargo del arquitecto Mark Fenwick y el Director General Sean Bai. En paralelo, dos alumnos de cuarto curso de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura (ETSA) de la UPV, Antonio Verdú y Mario Valle, viralizaban a través de las redes un proyecto englobado en la asignatura de «Proyectos 4» de Fundamentos de Arquitectura. El proyecto, llamado «Mestaverso«, no solo implica una solución futura para el antiguo coliseo de Mestalla, sino también trata de establecer nuevas relaciones con su entorno.
«El objetivo era crear una fantasía con base técnica para hacerla verosímil»
DissenyCV: ¿Cuáles son los objetivos generales del proyecto?
Mario Valle / Antonio Verdú: El objetivo principal era transformar el estadio de Mestalla añadiendo nuevos usos, tanto públicos como privados, reutilizando la propia estructura existente. Conservando de esta manera un elemento fundamental en el imaginario colectivo de la identidad de Valencia. Siempre desde la premisa de crear una fantasía pero con una base técnica que lo hiciese verosímil.
DissenyCV: ¿Por qué escoger Mestalla como objeto de realización del proyecto?
Mario Valle / Antonio Verdú: En la asignatura nos propusieron actuar en la parcela de Aragón con la intención de proyectar unos espacios residenciales y multiusos. Nosotros entendimos que la preexistencia del estadio era una oportunidad para dotar de una mayor identidad al proyecto y no hacer tabula rasa.
«El proyecto está abordado desde una conciencia medioambiental y económica»
DissenyCV: ¿Cuáles son los aspectos fundamentales sobre los que basáis vuestra propuesta?
Mario Valle / Antonio Verdú: El proyecto está abordado desde la conciencia medioambiental y económica. La reutilización de la estructura evita los procesos costosos y contaminantes de demoliciones y la posterior producción de más hormigón. A la vez se opta por materiales con menor huella de carbono como el CLT (madera contralaminada) o el metal allí donde es necesario. Por otro lado, se buscan soluciones que persiguen la eficiencia energética, como grandes corredores en la fachada que además de servir de espacio de socialización actúan como colchones térmicos y mitigadores del impacto acústico. Por último, el Mestaverso tiene una vocación de polo dinamizador de la ciudad, tanto como espacio público de calidad, como productor de energía y captador de CO2.
El proyecto se divide en cuatro fases
DissenyCV: ¿En qué fases habéis dividido vuestra propuesta?
Mario Valle / Antonio Verdú: La primera fase de la propuesta es la demolición de la grada original de 1923, facilitando así que el espacio central se comunique con la calle, y de la ampliación de los años 90 dada su situación de ilegalidad. Devolviendo al estadio la volumetría que tenía en los años 60 cuando se construyeron los edificios de su alrededor. Por suerte las tres ampliaciones que ha sufrido el estadio son estructuralmente independientes y no habría problema en ello.
La segunda fase es la ocupación interior de la grada por el programa público, fab labs, oficinas, gimnasios, restaurantes, aceleradores de start-ups, espacios de conexión con el metaverso,…
En una tercera fase se aprovecha el espacio del antiguo campo de fútbol como taller donde se construyen los módulos prefabricados de CLT que albergarán las viviendas, que posteriormente se elevan y apoyan sobre la grada, repartiendo sus cargas entre esta y un bosque de pilares metálicos auxiliares.
Finalmente, se culmina el proyecto ocupando el interior el campo con un gran jardín que a su vez actúa como tanque de retención de tormentas repleto de especies autóctonas, huertos de autoconsumo y estructuras de fomento de la biodiversidad.
