Charlamos con el fotógrafo y psicólogo castellonense al hilo de su reciente serie de imágenes sobre las Fallas.
DissenyCV: ¿Las fotografías sobre Fallas son preconcebidas o surgen de forma espontánea al calor de la fiesta?
José Bravo: Cada vez intento dejarme llevar más por lo espontáneo y menos por lo mental. Soy poco de preconcebir… Ahora, es cierto que las Fallas vienen siendo desde que comencé a hacer fotografías en Valencia una excusa perfecta para atreverme a esta aventura que es mirar a los demás. El año pasado no pude estar y este tenía ganas de volver a coger la cámara. Además, me estaba ocurriendo algo y es que estaba optando mucho por el móvil, al ser más cómodo y permitirme “jugar” más, arriesgar más, pues se pasa más inadvertido, y tenía un cierto bloqueo con mi cámara. Así que el hecho de salir con ella y dejar el móvil a un lado fue una especie de apuesta, volver a comprometerme como fotógrafo. Tuve además una intuición, y una necesidad. Estoy viviendo un momento bonito y necesitaba hablar desde un punto de vista muy sincero, muy propio, de las Fallas, devolverle a mi ciudad como si dijéramos, un poco de amor. A veces creo que desde el ámbito más creativo se le tienen demasiada tirria, o se tiene una mirada preconcebida demasiado negativa.
DissenyCV: ¿Qué te ha resultado más atractivo de retratar? ¿Y qué aspecto ha sido más complicado?
José Bravo: Cada fotografía es una elección en un momento dado. La atracción debería estar implícita en cada una de ellas. En mi caso, al ser muchas de ellas a personas, conllevan siempre un punto de atracción y otro de dificultad. Me atrae hablar de algo que aunque se observe en la calle, es en cierta manera íntimo, y ello implica también su riesgo, conecta con mi inseguridad. Y es toda esta mezcla la que me atrae. Es algo intuitivo y muy de aquí y ahora, veo algo en alguien que me “toca”, algo que tiene que ver con lo vivo, lo espontáneo, lo íntimo, lo emocional, lo misterioso, depende en cada momento. Lo más complicado es muchas veces atreverme a hacer la fotografía, o a hablar con la persona y compartirle qué es lo que me atraía de ella para mirarle.
DissenyCV: ¿Es posible y deseable huir de los tópicos a la hora de acercarse a las Fallas?
José Bravo: Yo creo que lo deseable siempre es ser fiel a uno mismo. Si un día salgo y estoy conectado con lo “tópico”, y me apetece hablar de ello, ¿por qué boicotearme en función de si es aconsejable o no hacerlo?. Creo sinceramente que cuando nos comprometemos con aquello que realmente nos apasiona y nos “toca” en cada momento, será más fácil que esto “llegue” a los demás. Mi “tópico” es lo humano. Por si mismas, las Fallas no me estimulan para fotografiarlas. No generan en mí lo que genera una persona, podré mirarlas, pero no me atrapan como para querer fotografiarlas. También es cierto que siempre que miro a gente que mira algo, me atrae normalmente más quien mira, que aquello a lo que mira.
DissenyCV: ¿Has notado a la gente más desenvuelta, con menos prejuicios a ser retratados, al tratarse de unas fiestas populares?
José Bravo: Lo que sí ocurre es que hay muchísima gente, muchísimas cámaras, y quieras que no, quienes fotografiamos pasamos en ese sentido más desapercibidos. En las multitudes, la gente va más despistada, más relajada, etc. Y si se sienten mirados, muchas veces piensan que no es a ellos. A muchas personas les cuesta aceptar que están atrayendo la mirada de un fotógrafo.
DissenyCV: El cromatismo saturado, barroquismo, el exceso en general de las Fallas puede ser un caramelo (envenenado) para un profesional de la imagen. ¿Es deseable mantener cierta distancia?
José Bravo: A mi ese componente sinceramente me interesa mucho, y de hecho las pocas fotografías que realicé con el móvil iban más hacia ese territorio, pero como os comentaba, con la cámara me comprometo más conmigo, desde lo emocional. Y emocionalmente estoy en un momento en el que me apetecía hablar desde otro lado, más humano, más íntimo, y más emocional.
DissenyCV: ¿Has sido o eres fallero? ¿Cuál es tu opinión acerca de Las Fallas?
José Bravo: Soy de Castellón y llevo 8 años aquí. Veo las Fallas como observador, no las he vivido nunca desde dentro. ¿Mi opinión sobre las Fallas? Lo que sí puedo decir es que minimizo todos los “peros” de los que en general todo ser viviente “no fallero” habla. Quizá me ayuda no tener coche, que me lleve bien con las aglomeraciones, y sobretodo, que me parezca que lo caótico, lo surreal, lo inesperado, lo grotesco, me resulta muy estimulante, muy interesante de ver también. Y sobretodo la confianza de que en cualquier lugar, en medio del más absoluto caos, si abro los ojos, puedo ver algo que me emocione.