El estudio valenciano diseñó para la comisión de Castielfabib un elefante compuesto de más de seis mil tubos de cartón.
En la última edición de las fiestas fallares, el estudio valenciano NITUNIYO fue contratado por la comisión de la Falla Castielfabib para elaborar su monumento infantil, en esencia una instalación urbana efímera. Entre las preocupaciones previas para el estudio, el modo en que los monumentos se apropian del espacio urbano, ya que durante los días de Fallas se reduce el ámbito del espacio público por la utilización de vallas y carpas para la protección de los monumentos, situación agravada por el incremento del número de transeúntes.
En la propuesta, «Somnis de pes», se buscó una alternativa para devolver la ciudad al ciudadano e incluirlo en la fiesta, permitiendo al viandante aproximarse al monumento fallero y tocarlo sin restricciones. Se representó la figura de un elefante para la Falla y que los niños pudieran acercarse y jugar con ella, eliminando las barreras físicas.
Al mismo tiempo, se quiso evitar a toda costa la utilización del poliestireno expandido, de uso común, cuya combustión es contaminante y para ello se empleó en su lugar otro producto de combustión más limpia. Para ello se utilizaron más de 6.000 tubos de cartón reciclado, que están apilados formando un patrón de celdillas, que, a modo de píxels recomponen la silueta del animal.
Se ofreció la posibilidad de que quien quisiera hacerlo, pudiera plasmar sus deseos en papeles de color e introducirlos en los huecos de los tubos que formaban la figura. Así, la instalación adquiere carácter participativo, interactuando con el observador, y a la vez, la falla va adquiriendo color, algo imprescindible en estas fiestas.
Diego Opazo nos hace este regalo enseñando cómo fueron los últimos dias de la elefanta que realizó Nituniyo para la Falla Castielfabib en Valencia en marzo del 2015.