Nuevo trabajo de Pedro González para Mari Mayans

Diseño de la nueva identidad de la marca IBZ Ginebra Premium.

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El Estudio Pedro González ha presentado su último proyecto para la marca Mari Mayans, productores de licores y hierbas desde hace 130 años, con sede en Ibiza. El estudio valenciano se ha encargado del diseño de la nueva identidad de la marca IBZ Ginebra Premium, uno de los nuevos productos de la firma.

El nombre del producto, IBZ, tiene una fuerte conexión con los hashtags de las redes sociales. Este fue el punto de partida para que Estudio Pedro González creara una imagen que mimetizara la etiqueta de facturación de las maletas. “Para ello, estudiamos los elementos de cualquier etiqueta de facturación y los adaptamos, incluyendo la marca, los grados de alcohol del producto, el volumen, etc. y luego pequeños detalles como el punto de geolocalización de la isla, el código de barras real de la botella o el proceso de fabricación de la ginebra”, detalla Pedro González, director de arte del proyecto.

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“La botella cilíndrica de IBZ es totalmente transparente y está teñida de verde translúcido en su parte superior e inferior. Su diseño está serigrafiado sobre el vidrio en verde y negro. El verde de la etiqueta de facturación y el negro que da la información sobre el producto. Además, un ácido imita motivos florales de frígola y romero, elementos que nos remite tanto a la isla de Ibiza como a la familia Mari Mayans”, comenta Pedro González.

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“A escala técnica este diseño fue muy complicado de llevar a cabo, por la dificultad que implica serigrafiar en vidrio a dos tintas sobre ácido. Se realizaron muchas pruebas reales para obtener un buen resultado. Finalmente la temperatura de fijación de cada una de las tintas fue determinante para poder controlar su superposición. Además, la base y la parte superior de la botella están teñidas de tinta verde traslúcida que da lugar a transparencias”, detalla Pedro. “Estos ligeros tonos verdes dotan a la botella de una atmósfera que nos remite de nuevo al producto que lleva dentro, el alcohol. En todo momento, la imagen de la ginebra crea juegos visuales que van intrínsecos al producto que contiene y a sus efectos”, explica Pedro González.

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Alcanzar que todos estos detalles técnicos tuvieran el resultado esperado no fue fácil: “Lo conseguimos gracias a una buena comunicación con el fabricante. Ellos conocen perfectamente las temperaturas de cocción de las tintas, de los ácidos, etc. Son ellos los que nos guían una vez el boceto está aprobado. De esta manera podemos proponer al cliente y que el resultado final sea exactamente el mismo que un día nosotros planteamos. Aunque siempre, de por medio, tenemos muchos intentos y pruebas que nos hacen ir mejorando y aprender”, detalla el diseñador.