Tomás Gorria entrevista al autor de «Manual de tipografía digital».
Tomás Gorria.
Daniel Rodríguez Valero es especialista en branding y Tipografía Digital, profesor de publicidad en la Universidad de Alicante y director del Posgrado de estrategia en redes sociales además de premio CLAP Platino (1er premio) 2015 a la mejor tipografía de texto iberoamericana por la EHU. Además, imparte talleres de iniciación a la caligrafía. Campgràfic, la editorial valenciana especializada en tipografía, acaba de publicar su Manual de tipografía digital, una referencia imprescindible para los interesados en este campo. Os presentamos una entrevista con el autor del Manual.
DissenyCV: ¿Puedes contar en pocas palabras qué es el Manual de tipografía digital?
Daniel Rodríguez Valero: Es el libro que me hubiera gustado tener cuando estudiaba diseño gráfico a los veinte años para entender cómo funcionaban aquellas fuentes en formato PostScript Tipo 1, más el libro que me habría ahorrado muchos quebraderos de cabeza a los treinta, cuando hice el postgrado en tipografía digital y la tesis, aprendiendo cómo se diseñaban y producían las tipografías.
DissenyCV: ¿Por qué crees que era necesario un libro como este?
Daniel Rodríguez Valero: Nuestra disciplina —la tipografía— necesita, especialmente en castellano, que documentemos y expliquemos a las futuras generaciones qué estamos haciendo y cómo lo hacemos; al poner en marcha el blog tipografiadigital.net pude comprobar que había mercado para todos y cada uno de los temas que me interesan —o debería decir obsesionan— y ahora solo falta comprobar si ese mercado está dispuesto a pagar por tener la información ordenada e impresa.
DissenyCV: ¿Tenemos que revisar muchos conceptos tipográficos por los nuevos contextos en que aparece la tipografía?
Daniel Rodríguez Valero: Sin duda, en tipografía hemos heredado muchos conceptos de una tecnología con unas restricciones que ahora simplemente han desaparecido, al tiempo que disponemos de posibilidades inimaginables hace 50 años y a las que sacamos poco o ningún partido. Me refiero tanto al diseño, como a la producción y a la distribución de las tipografías, aspectos que se abordan a fondo en el libro y que son gran parte de su propuesta de valor.
DissenyCV: ¿Crees que a día de hoy se puede hacer algún distingo entre tipografía digital y análogica, no podríamos decir que toda la tipografía es ya digital?
Daniel Rodríguez Valero: A mí me ponen las letras en todos sus formatos, cada uno tiene su encanto; y aunque podríamos decir que lo digital va ganando la partida, los seres humanos tendemos al equilibrio y lo analógico empieza a gozar de una salud estupenda. Además, dentro de lo digital hay mucho analógico camuflado: el concepto mismo de curvas Bézier es analógico, y lo necesitamos para dibujar mejor; si quisiéramos ser 100% digitales tendríamos que dibujar píxel a píxel o, mejor todavía, escribir líneas de código y ver qué sale. Recomiendo a todo el mundo el libro Analógico y Digital, de Otl Aicher, para entender mejor qué demonios estamos haciendo.
DissenyCV: La ciencia avanza que es una barbaridad. ¿No te parece que un manual de estas características puede quedar obsoleto en pocos años por los avances en el ámbito digital? ¿Te planteas su actualización?
Daniel Rodríguez Valero: Un libro, como concepto mismo, es algo que nace obsoleto por definición; es por su valor documental que los imprimimos y los conservamos. Confiamos en ellos porque sabemos que no van a cambiar, cosa que no pasa en formatos “digitales”, por seguir tu distinción de la pregunta anterior.
Ahora bien, en mi manual he tenido mucho cuidado en no trabajar con ningún programa concreto sino con conceptos, que son fáciles de encontrar cuando sabes que existen y cómo se llaman. Está escrito para aguantar muchos años, aunque siempre habrá avances que iré ampliando a través del blog. Si agotamos la primera edición, ya hablaremos…
DissenyCV: Cómo ves el futuro de las pantallas en relación con la tipografía?
Daniel Rodríguez Valero: Sin hinting; querido lector, si quieres saber qué carajo es eso, consulta el capítulo 3.3. de mi libro (Manual de tipografía digital, editorial Campgràfic, Valencia 2016).
DissenyCV: Te has mostrado partidario en la opción del copyleft en el tema de las licencias tipográficas, ¿por qué?
Daniel Rodríguez Valero: Porque el copyright ni nos defiende, ni protege nuestra obra, no sirve para otra cosa que para cuidar los intereses de unos pocos, los que más dinero tienen (para ir a juicios millonarios y comprar abogados buenos). Nosotros, los de abajo, los parias (ahora que está de moda hablar de castas), estamos en manos de la buena fe de los usuarios y clientes. Si al final todo es cuestión de fiarse del prójimo, y el copyleft nació con esa filosofía, puede ser un buen sistema para comercializar nuestro trabajo; se trata de cambiar el chip y dejar de vender productos para pasar a vender servicios; el producto digital no vale nada en la mente del consumidor, porque todos sabemos lo poco —o nada— que cuesta copiarlo y enviarlo a la Conchinchina. Sin embargo el servicio, las horas de trabajo, sí se valoran algo mejor. El mundo ha cambiado mucho y son pocos los que se han adaptado al nuevo sistema, hay muchos conceptos heredados de tecnologías anteriores que, simplemente, ya no tienen sentido; pagar primero y descargar después es una de ellas.
DissenyCV: ¿Cómo está el campo de la investigación tipográfica en España?
Daniel Rodríguez Valero: Peor de lo que me gustaría y mejor de lo que me esperaba hace 10 años, cuando me doctoré por la Universidad de Barcelona. De todas formas, no soy partidario de la queja, prefiero hacer mi camino y dejar que otros se unan para ir sumando; el movimiento se demuestra andando, que dice el refrán.
DissenyCV: Tu blog sobre tipografía digital (http://tipografiadigital.net) es una referencia obligada en este ámbito, háblanos un poco del blog.
Daniel Rodríguez Valero: El blog es un banco de pruebas, una herramienta donde comprobar si el libro que estaba planeando tenía interés, al tiempo que me permite recopilar ejemplos, tendencias, documentar y llevar un registro que de otra manera me costaría mucho. Además he logrado que sea sostenible sin poner un solo anuncio, he aprendido un poco de SEO, de marketing, etc. Al final se trata de una extensión orgánica y fluida del libro, un sitio donde poder escribir en un tono todavía más cercano y donde averiguar de qué quiere mi audiencia que les hable. Desde luego, el que no tenga un blog, le recomiendo que se ponga en marcha YA, es más barato que un máster y se aprende más… ¡y es más divertido!
